Beach style!!!

Recuerdo cuando era pequeña y mi madre me decía: "Noelia, necesitas ropa deportiva para las clases de gimnasia del cole", temblaba de la cabeza a los pies. Con lo que a mí me gustaba la palabra "compras" pero asociada al deporte, lo que era lo mismo que decir chándal, era sentir una especie de escalofrió que me recorría el cuerpo, alergia total. En mi opinión Noelia-deporte tienen la misma relación que tacón de aguja-deporte, es decir, ninguna.
Mi compi Maru me animo, en 1997-98, a apuntarme con ella al gym. Casi todos los mediodías nos quedábamos a comer en el trabajo, pero dos horas eran mucho tiempo, así que ella pensó que sería una idea fantástica. Lo primero que tuve que hacer fue comprarme unos botines para practicar aerobic. Como no tenía ni idea de las características que tenía que cumplir dicho calzado, me fui al departamento de deporte de unas Grandes superficies para que me ayudaran. Creo que fue la primera vez en mi vida que yo pisaba aquel departamento, los de moda me los sabía de memoria pero esa cosas raras que veía en los expositores sólo lo había visto de pasada en la tele durante los Juegos Olímpicos. Un dependiente muy amable me preguntó qué era lo que deseaba;
- Quiero unos botines que tengan muy buena "amortización" para practicar aerobic.
- Perdone señorita, dirá usted que los botines deben tener muy buena "amortiguación".
- (Tierra trágame!!!) Si por supuesto, me confundí de palabra.
Compré los primero que me enseñó, casi 15.000 pesetas de aquellos tiempos que eran un dineral, pero lo único que quería era salir corriendo de allí y no seguir viendo aquella sonrisita de “esta niña es tonta”.
Han pasado más de 15 años, aquellos botines siguen en casa oliendo a nuevo. En el gimnasio que Maru y yo nos apuntamos había sauna y la convencí que yo sudaba más en la sauna que pegando saltos en una sala llena de gente que siempre iba en dirección contraria a la mía, yo creo que lo hacían queriendo.
Tuvieron que pasar más de 10 años antes de que me volviera a acercar a un centro deportivo. Me dio una contractura y el osteópata me dijo que el Pilates sería ideal para mí y una forma ideal de prevenir más contracturas, pasar tantas horas delante del ordenador es lo que tiene, contracturas en el cuello casi seguras. Mi relación con el Pilates si me gustó, dos años en los que estuve encantada. Eso sí, en mi armario no entro un chándal, ni nada de microfibra, nada que fuera ropa deportiva. A clase de Pilates asistía con leggins y con camisetas que ya no utilizaba es mi día a día. Algunas de ellas con lentejuelas, con tachuelas, con brillo,... practicar deporte con glamour, así controlaba la alergia.
Que se le va hacer el deporte no viene incluido en mi genética ni en mis aficiones. En cambio mis dos amigas, Asun y Susana si tienen la pasión por el deporte que a mí me falta. Me encanta escucharlas hablar de sus sesiones de gym, de sus entrenamientos para participar en carreras y verlas tan monísimas con su ropa deportiva. A ellas les dedico este video que me ha gustado tanto y me parece tan emotivo: MUJERES DEPORTISTAS. Desde la barrera las sigo animando a realizar algo que les gusta tanto, pero siempre desde la barrera por si mi alergia se manifiesta.
Tampoco descuido mis estilismos para ir a la playa, siempre hay que estar de 10 independientemente de el lugar al que vayas!!!! No porque te vayas a encontrar con alguien, sino por ti, siempre a gusto contigo misma.

Blusón con adornos en las mangas de lentejuelas y bolsillos.
Talla única.
Color: celeste, vaquero, rosa y coral.
Precio: 12 €
Celeste
Azul vaquero


Coral
Rosa




Blusón arabesco con encaje blanco.
Talla única.
Color: blanco, coral y fucsia.
Precio: 13 €
Blanca

Fucsia

Coral
Blusón encaje.
Talla única. 
Color: blanco, verde aguamarina, rosa y celeste.
Precio: 18 €
Verde aguamarina
Rosa


Celeste


Cesto de mimbre con corazón lentejuela.
Protector contra la arena.
Precio: 30 €. 




No hay comentarios:

Publicar un comentario