Sale mi hijo mayor del colegio y me dice: "Mamá después de hacer los
deberes te voy a enseñar un juego nuevo que me han explicado en clase. Se llama
Charlie, Charlie." Al ver mi cara de "no tengo ni idea", me lo
explicó:
"En un folio se hace una cruz dividiéndolo en cuatro partes iguales.
En dos partes en diagonal se pone Yes y en las otras dos No, que queden
opuestos. Se pone un lápiz en la línea vertical y otro lápiz sobre este. Te
haces un pequeño corte en la mano para que tu sangre caiga sobre el papel. Y
después llamas a Charlie, dos veces. Y a partir de ahí realizas pregunta y el
espíritu de Charlie te contesta."
Tienes la boca abierta??? Seguro que sí!!! A mí me llegaba al suelo. Tuve que respirar tres veces muy despacio, si lo hubiera hecho tan rápido
como me latía el corazón hubiese hiperventilado!!!! Cerrar los ojos y abrirlos
para comprobar que no era un sueño. También tuve que sujetarme el brazo derecho
con la mano izquierda, porque el siguiente impulso que tuve fue darle un
"capón" al niño de once años que se cree muy mayor.
Porque todos los niñ@s tenemos que pasar por la etapa de hacer la tontería
de la Guija, de convocar espíritus y demás??? Sí, pasamos todos, bueno seguro
que alguno inteligente habrá que tenga suficiente personalidad para reírse de
quien le propone convocar espíritus, verdad???
Con lo miedosa que soy todavía recuerdo mi experiencia traumática y si miro
en mi dedo pulgar derecho, puedo ver la señal que las tijeras dejaron en mi
mano. Cuando tenía unos diez años, me explicaron el juego de moda. Samanta a
quien se convocaba, ahora cada vez que veo Master Chef y dicen Samanta me da escalofríos.
En mi "época", una tijeras se anudaban con un lazo a un cuaderno, los
dedos se introducían por los ojos de la tijera que, figuradamente eran los ojos
de Samanta, cuando el cuaderno oscilaba era Sí y si giraba la respuesta a la
pregunta formulada era No. Mi conejillo de india, mi hermana, yo sola no me
atrevía hacerlo. No sé cómo las tijeras se me escaparon de la mano y se
clavaron en mi dedito. A mis gritos y lloros mi madre apareció en la
habitación. Cuando más o menos comprendió lo que estaba pasando y vio el
edredón manchado de sangre... ella no controlo su brazo derecho ni el
izquierdo, ni su mandíbula cayó a los pies, le dio por gritar.
Así que en mi casa ni Charlie, ni Samanta, ni nadie a quien no pueda
invitar a café y me ponga a charlar tranquilamente.
Sabes que me encanta que brilles... es el objetivo principal de mis propuestas!!! Así que con estas blusas con lentejuelas me ayudarán a conseguirlo.
Blusa con nudo en espalda.
Talla única.
Color: blanco, coral, plata, rosa, marfil,...
Precio: 14 €
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| Plata |
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| Lazada |
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| Blanca |
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| Coral |
Blusa franjas de lentejuelas.
Talla única.
Color: blanco, verde caza, azul marino, rosa, verde aguamarina y coral.
Precio: 16 €
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