Blusón: Look pisci-playero o Look de calle? Ambos!!!


Ayer se casó mi prima Silvia. Me pidió que fuera la encargada de decir unas palabras en la apertura del banquete nupcial. Un orgullo ser la persona elegida. Quiero compartir contigo mis palabras, lo que no puedo compartir contigo de forma escrita fueron las emociones que acudían a mí con cada palabra. Mis nervios aumentaban con cada frase. El papel temblaba en mis manos con una hoja en un árbol, pero no mecida por una suave brisa sino sacudida por un huracán. Sólo me fijaba en los novios, en las lágrimas de mi prima. Después de terminar abrazarme a ellos y volver a mi mesa, me dijeron que más de uno lloro al escucharme. Eso sólo puede significar que conseguí transmitir todo el cariño que le tengo a mi prima.

Silvia contigo siempre. Acabada la "operación boda", espero que pronto estemos preparando la "operación bebé", si es niña no doy el discurso me pido madrina!!!!

Complementos: gargantillas, pulseras, pendientes


Si te vas de vacaciones a la playa con los niños y tu marido se queda en casa, porque tiene que trabajar. Quién crees que lo pasará mejor???

Seguramente tú marido!!!! Tienes que tener claro qué, durante los días que va a estar sólo:
  • La cama no se hará
  • Todos los días comerá precocinados o los tappers que tú le hayas dejado preparado
  • Los platos y vasos se acumularan en el fregadero, hasta que ya no quepan y pasen al lavavajillas, que será puesto o no por desconocimiento del funcionamiento, verdad?
  • La ropa sucia estará en el suelo del baño, alrededor de la cesta destinada a guardar la ropa hasta que pase a la lavadora
  • Lavadora??? Noooo. Toda la ropa te estará esperando a tu vuelta. Y si se queda sin calcetines?? No hay problema, se ponen un segundo día y listo
  • Barrer, pasar la mopa o la bayeta del polvo???? Esas palabras no se conocen en su vocabulario así que... ya lo harás a tú a la vuelta
  • El aire acondicionado a toda potencia todo el día y toda la noche, aunque tenga que dormir tapado!!!!

CAMISETAS COLOR


Hoy he leído un artículo en internet que me ha encantado. Frases de película, esas frases que incluso ya hemos incorporado a nuestras conversaciones. Frases que impactaron tanto por la emoción que transmitían o porque te hacen sacar una sonrisa.

  • La vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar. Tom Hank, en su papel de Forrest Gump, nos emocionaba. Toda la película está llena de detalles que te hacen pensar que pase lo que pase siempre tendrás más cosas que esperar después.
  • A Dios pongo por testigo que nunca volveré a pasar hambre. Scarlett O'Hara en Lo que el viento se llevó. Está me encanta es una frase de luchadora. Aunque aquel atractivo Rhett Butler diciendo: Francamente, querida, me importa un bledo, es también memorable. La película entera lo es, no sé cuántas y cuantas veces la he visto.
  • Houston, tenemos un problema. Apolo 13 nos dejaba esta frase. Es la más utilizada por mí. Cada vez que uno de mis alumn@s me llamaba para consultarme algo se la decía. No hay nada mejor que quitarle importancia.

Camiseta básica que da mucho juego


Cuando tenía de ocho a diez años los viernes tarde-noche teníamos un ritual en casa. 

Mi hermana y yo teníamos las melenas larguísimas, casi por la cintura, era la moda. Mi madre nos metía en la bañera y nos lavaba la cabeza haciendo montañas de cabello con espuma. Enjuagar muy bien. Y después las montañas volvían con la crema suavizante.

En invierno nos ponía las camisetas en el radiador, de la marca Garza, no se me olvidará. Este tenía rueda y siempre en casa se decía "lleva el Garza a la cocina", "lleva el Garza a la salita", "lleva el garza,...", era como nuestra mascota la paseábamos de una habitación a otra.

Después del baño tocaba la cena. Un huevo pasado por agua, siempre los viernes era la misma cena. Los odiábamos, desde entonces creo que no he vuelto a comer un huevo cocinado de esa manera. Sabíamos perfectamente que si no lo comíamos no teníamos recompensa. Nos los hacía en un electrodoméstico especial para huevos pasados por agua. Una especie de olla pequeña donde se colocaban los vasitos, estos eran de cristal con tapadera amarilla. Cuando el huevo estaba en su punto, el aparatito para avisar tenía una música inconfundible, de esas tan pesadas como el carrito de los helados que pasa por la playa. En el vasito echábamos mucho pan, mucho pero que mucho pan, para no notar las "babas" del huevo, arggggg, todavía al pensarlo me dar repelús.