Los estampados que arrasan!!!

Cuanto tiempo hace que...

  • vas a una fiesta de espuma??? Rodeada de espuma por todos lados. Aguantando que el pesado de turno cada vez que miras para otro lado te lance espuma!!! Hasta que lo pillas desprevenido y le atacas con tal cantidad de espuma que se le quitan las ganas de gastar bromas durante toda la noche. Llegar a casa con el pelo tieso, preguntándote por el tipo de jabón con el que hacen esa espuma. Y al quitarte la ropa descubrir que tus vaqueros han desteñido y pareces pitufina. Hace mucho??
  • te comes un helado con tu chico y sin querer al mover la mano en la que llevas el cucurucho le estampas la bola de puro chocolate en el centro de su perfecta camisa blanca??? Contenerte durante 5 segundos y estallar en carcajadas. Sabiendo que a continuación estarás cubierta de helado. Pero no importarte en absoluto por las manchas porque esas risas te han llenado el alma. Cuando fue tu última guerra de helado??
  • la última vez que te sentaste en el Parque María Luisa con un libro??? Quizás arrullada por el sonido de las palomas con una temperatura ideal, ni frio ni calor, sin importarte la hora que marcase el reloj de tu muñeca, controlador de cada segundo de tu día. Sentarte y disfrutar la lectura, levantando la vista de vez en cuando para ver al pequeño que da sus primeros pasos o a la niña que papa le enseña a montar en bici sin ruedines. Levantas la vista porque sabes que algo de tu alrededor te sacará la sonrisa. Recuerdas donde está el Parque María Luisa??
  • ponerte delante de un plato gigante de tortitas con nata, echarle doble de chocolate y no pensar en el vestido que te esta un pelín estrecho y que acabará al fondo de tu armario por no podértelo poner??? Comer sin sentimiento de culpabilidad, sin tener a una pequeña doble tuya en tu hombre mirándote reprobadora. La última vez soplaste y desapareció; pero crees que eso ocurrió hace mil años???

Lunares para la Feria!!!!

Feria de Abril 2015. Oficialmente comenzamos el martes a las 12 en punto con el Alumbrao, pero desde el fin de semana anterior el Real tiene tu característico bullicio, lo único que le falta son los trajes de faralaes. Con la excusa del “montaje” la manzanilla comienza a correr, las sevillanas suenan para probar los altavoces y las sonrisas se dibujan en los labios de los que viven la Feria al 100%.

Quién le iba decir a un catalán en su afán por hacer negocios, allá por 1846, que la compra-venta de ganado se convertiría en una de las fiestas más internacionales de España. Pero claro, donde hay una reunión de trabajo hay que hacer descansos para comer. El hombre quedaría maravillado por el jamón, la caña de lomo, el vino de la tierra,.. de una cosa se pasó a otra, se liaron se liaron, y dejaron de vender ganado sólo se celebraban las reuniones para encontrarse con amigos, beber, comer y charlar; lo que mejor se puede hacer en la Feria. Hasta 1973 la Feria de Abril se celebraba en el Prado San Sebastián, después paso a los Remedios y  rumores se escuchan todos los años que pronto se trasladará al Charco la Pava, pero por ahora los rumores se los lleva la brisa del Guadalquivir.

Desde las 12 de la mañana hasta las 8 de la tarde se puede disfrutar del paseo de caballo por el real, caballos con jinetes bien vestidos y flamencas guapísimas. También las carriolas llenas de vestidos coloridos, pasan junto a ti escuchando un fragmento de sevillana cantadas por quien va en ella montado. Si te pones en la acera viendo pasar las carriolas y coches de caballo puedes escuchar la discografía completa de los Cantores de Híspalis!!! Sólo un año en la Feria no se pudo disfrutar del paseo de caballos, 1990, por la peste equina. Lo recuerdo perfectamente, el sonido ambiente era distinto, estaba incompleto. No puede faltar nada porque se echa de menos. Te imaginas ir a la calle del Infierno y no escuchar al de la Tómbola pegar gritos para llamar tu atención???? Sería raro, muy raro.

Tu vestido largo o corto???

Que yo me quede sin palabras es difícil, pero a veces... Si mis lágrimas salen de mis ojos sin control mis palabras se quedan en mis labios para no restarles protagonismo.

Así que sólo te pido que veas este vídeo y que pienses en la suerte que tienes. Yo la tengo y me gusta valorarlo.


Camiseta original con pañuelo

"Niña, baja a la tienda de Maruchi y que te dé pan rallado que me acabo de dar cuenta que no tengo." Todos teníamos en nuestro barrio una tienda que quizás tuviese un nombre pero la conocíamos por el nombre de la dueña: Maruchi, Mely, Choni,... algún nombre en diminutivo para sentirla como más cercana, casi llegaba a ser parte de la familia. Teníamos tanta confianza con ella que nos decía: "Dile a tu madre que baje ya a pagar que se me está acabando el folio de apuntar!!!" y a tu madre no le sentaba mal, porque un acuerdo no firmado era que allí no se pagaba hasta que te pedían el dinero. Así era antes. Hoy en día no sales de la línea de caja sin abonar tu compra antes, y junto con tu ticket te dan: un descuento para tu próxima compra, vales descuentos para productos en promoción, un vale de regalo de 6 litros de leche si vas a comprar el sábado,… el folio te lo llevas tú.

Cuando habrían una nueva tienda en el barrio mientras todos nos aprendíamos el nombre de la dueña se llamaba "la tienda de la esquina" o la "tienda de abajo", todo lo que no fuera llamarla por el nombre que ponía en el cartel: Horno-panificadora Santa Mª de los Ángeles. Se tardaba más en decir el nombre completo que llegar, entrar y comprar.
En estas tiendas se respiraba un aire distinto por dos motivos:
  • Te sentías a gusto con tus vecinas comentando lo bonito que era el bebé recién nacido de la chica del quinto, la brecha en la cabeza que se había hecho el diablillo de la del tercero, como la que no quería la cosa alguien comentaban "el vecino del primero no viaja mucho últimamente?", ese ambiente se respiraba, un ambiente de entrañable cuchicheo de vecinas interesadas por el bienestar de su comunidad.
  • Olor a papel de estraza donde envolvían el cuarto de queso o el trozo de jamón para el puchero. Olor a chorizos colgados en la pared, traídos directamente del pueblo del primo del cuñado de la dueña. Olores a madera de los muebles. Olor a ultramarinos. Cierra corriendo los ojos y nota como ese olor llega a ti.