Porque hay días que se quedan grabados en
tu mente por cosas que son insignificantes??? Y de pronto tienes aquel día en
la mente como si hubiera sido ayer mismo.
14 de febrero de 1989, algunos añitos han
pasado y desde principios de septiembre me acuerdo mucho de aquel día en el que
ocurrieron dos cosas "diferentes" en mi casa.
Chispa, la caniche de la familia, tuvo 6
cachorritos. Las bolitas negras empezaron a llegar al mundo sobre las doce y
media de la mañana. A las 2:30, obligada por mi madre, salía para el instituto
y dejaba a Chispa con su multiparto, con todo el dolor de mi corazón!!!
A las 9 regresé del insti, nunca hice
el camino tan rápido, quería ver cómo había acabado todo. Cuando papá llego a casa
vio tres cabezas pegadas mirando a los cachorritos: mi madre, mi hermana y yo.
Tan entusiasmadas estábamos que no nos fijamos en la caja enorme que venía con
él. Era el regalo para mamá del día de los enamorados: una televisión, pero no
una televisión cualquiera, una con mando a distancia, la primera que entraba en
casa. La primera que te permitía no moverte del sofá en ningún momento!!!!!
Cuando mi padre la instaló y nos sentamos
a probarla, recuerdo que nos quitábamos el mando los unos a los otros para
cambiar de canal y variar el volumen. Que digo yo, que sería más bien a probar
el volumen, porque en el 89 solo había dos canales de televisión, la 1 y la 2,
faltaba un año para que llegase Antena 3 y Telecinco a nuestras vidas. Papá mientras cenábamos le dijo a mamá:
"La verdad es que la tele es tu regalo, el mando es el mío. Estaba cansado
de ser el cambiador oficial de la casa".
Que hace que este día sea últimamente tan
recordado?? Mi reforma de la cocina. Sí, tiene relación ya verás.