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Pañuelo o manterola???

Comienzan a refrescar los días... que no te coja desprevenidas!!!!
Tendencias para los nuevos pañuelos y manterolas para este otoño-invierno!!!! Todas ideales!!!!

Vídeo de la propuesta... Aquí

Pañuelos reversibles de lunares.
Color: perla-plata, negro-plomo, azul-plata y beige-dorado.
Precio: 8 €

Pañuelo o manterola???

Desde Zahara con Amor

“Esos pequeños nódulos, en principio sin importancia. Las continuas afonías y dolor de garganta. Pueden ser causados por uno de estos tres motivos: persona muy nerviosa, hablar continuamente y tener un volumen alto de voz.”
No lo tuve que pensar mucho tiempo… “Tres de tres!!! Afirmativo para todo.”
Mi logopeda ya tenía clara la situación desde la primera sesión que tuve con ella. Lo que me sorprendió fue como se iban a desarrollar las sesiones a partir de aquella.
Sesión 1. El lugar que ocupe los primeros minutos de la hora que permanecía en su despacho era su sillón, que se reclinaba hacía tras. Me pidió que siguiera las instrucciones de la grabación. “Cierra los ojos y respira lentamente. Coloca tus manos sobre tus piernas. Centra tu atención en tu mano derecha, siente como pesa y como se relaja. Concéntrate en tu mano izquierda, siente como pesa y como se relaja. Respira y nota como tus manos no pertenecen a tu cuerpo.” Primera etapa superada.
Sesión 2. Reclinada en su sillón esta vez esa voz profunda me pedía que aprendiera a relajar mis piernas.
Sesión 3. Los brazos.
Sesión 4. El tronco.
Sesión 5. Cuello y cabeza.
Sesión 6. Todo: manos, piernas, brazos, tronco, cuello y cabeza. Tuve la sensación de relax máximo. Me veía tumbada y yo flotaba.
Sesión 7-10: Pensé que ya al controlar todo mi cuerpo la relajación había acabado pero cuando se lo comenté me dijo: “No, Noelia, queda la parte más difícil. Relajar tu mente. Seguro que mientras que estas relajada en este sillón has pensado en lo que vas a preparar de cenar o en otras tareas pendientes. Tienes que desconectar por completo, cuerpo y mente.”
En esta ocasión la voz que activaba mi desactivación me pidió que me mirara en un espejo y que me gustara la imagen que viese reflejada. Que pusiera la mano en el espejo para pasar al otro lado, a mi lugar preferido y que no solo viese detalles sino que también lo sintiese. En cada una de las sesiones que estuve practicando este ejercicio realmente me sentí transportada: